Como profesor de Economía de la Universidad de Málaga he sido invitado a dar conferencias o a participar en actividades académicas en universidades de Argentina, Brasil, Colombia, Chipre, Estados Unidos, Francia, Grecia, Guatemala, Honduras, Malta, Marruecos, México, Perú, Rumania, Senegal, Tailandia, Turquía y Venezuela. Doy gracias a los profesores y amigos que me permitieron conocer sus países con cargo al erario público. He vuelto después como turista a varios de ellos.
Como turista he viajado además por Alemania, Australia, Austria, Bélgica, Bolivia, Catar, Camboya, Chequia, Dubái, Egipto, Etiopía, Holanda, India, Italia, Irán, Irlanda, Kenia, Luxemburgo, Myanmar, Nepal, Noruega, Portugal, Reino Unido, Rusia, Suiza, Uruguay y Vietnam. Doy gracias a los guías que me enseñaron orgullosos las riquezas y costumbres de sus pueblos.

También he acompañado a Ruy González de Clavijo por Constantinopla, Trebisonda y Samarcanda en su embajada a Tamerlán, a Alvar Núñez Cabeza de Vaca en sus naufragios en la Florida, a Samuel Pepys en sus paseos por Londres durante la Gran Peste y el Gran Incendio. El mestizo Garcilaso me mostró las riquezas de los incas. Gracias a viajeros, arqueólogos e historiadores he podido viajar en el tiempo y conocer Sumeria, Acadia, Babilonia, Hatti, Fergana, Sogdiana, Bactria, Kucha, Vijayanagara, Wei, Qin y muchos otros reinos e imperios que solo siguen vivos en los libros.
Juan Luis Arsuaga, José María Bermúdez de Castro, Eudald Carbonell y muchos otros paleoantropólogos me han permitido entrever cómo era la vida en sociedades muy antiguas y su evolución. Edward O. Wilson y Richard Dawkins me permitieron conocer y comprender el comportamiento social de los animales, incluyendo los homínidos. Los físicos me llevaron de viaje al interior del átomo, al espacio exterior y al origen del universo. Otros autores y maestros me mostraron los mundos abstractos de las matemáticas y la música. Filósofos, psicólogos y neurólogos me han guiado por el interior de la mente humana.
La ciencia económica me ha permitido comprender el origen de los templos, los palacios, los castillos y los tesoros de los museos que he visitado. Cómo durante toda la historia de la humanidad los ricos y poderosos han utilizado su poder y su riqueza para acumular más riqueza y más poder y conseguir el sometimiento de los pueblos. Cuanto más grande la ciudad, más poblado el reino y más amplio el imperio, mayor es el poder y la riqueza acumulados y más fuertes son los castillos, más lujosos los palacios, más ricos los templos y más altos los rascacielos.
Siendo muy joven acompañé a Jim Hawkins y Long John Silver en su viaje a la isla del tesoro. También recorrí 20.000 leguas de viaje submarino y di la vuelta al mundo en ochenta días. Debo dar las gracias a todos los escritores que me han transportado por mares y ríos, selvas y desiertos, a los hogares, aldeas, pueblos, barrios, ciudades y reinos que conocieron o imaginaron. He vivido también en fundaciones e imperios galácticos.
He visto cosas que no creeríais: naves de combate en llamas más allá de Orión. He visto rayos C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. Todos esos momentos se perderán… en el tiempo… como lágrimas en la lluvia.